Otra de las fascinantes ciudades europeas para unas vacaciones inolvidables es Munich, situada cerca de los Alpes y con un encanto de 800 años de edad, siendo la capital de Baviera y el hogar del mundialmente famoso Festival Oktoberfest.
Hay que destacar que los vuelos a Munich están garantizados para los turistas que buscan comodidad y eficiencia con la moderniddad del Aeropuerto Franz Josef Strauss, que es el segundo del país y que proporciona el necesario transporte al centro de la ciudad con un Tren Rápido, omnibuses, tranvías y taxis.
Una vez en la ciudad llama la atención una de las estructuras más reconocibles de Munich es el Frauenkirche ( la Iglesia de Nuestra Señora) reconstruida tras los daños de la Segunda Guerra Mundial que prácticamente destruyó la iglesia. Este imponente monumento religioso está situada en el centro de la ciudad y es la catedral católica más importante de Munich.
Cabe anotar también que el visitante puede subir a la cima de la torre sur de la catedral desde la cual se tiene una vista excepcional de Munich y de los Alpes.
Las crónicas relatan que la Catedral sustituyó a la antigua iglesia románica construida en el siglo XII. Y para renovarla empezó su edificación en 1468 con dos torres que se terminaron en 1488 siendo consagrada en 1494. Sin embargo, las famosas cúpulas de las torres no fueron construidas hasta 1525.
Para el diseño se inspiró en la Cúpula de la Roca de Jerusalén, que tiene influencias del arte bizantino. Llama la atención también que la Frauenkirche fue construida en ladrillo rojo que le bronda un estilo muy recatado sin la ostentación de los típicos ornamentos góticos de la época.
Arquitectónicamente, la catedral de Nuestra Señora tiene una altura de 109 metros y 40 metros de ancho en donde las dos torres poseen una altura de 99 metros. En el plan original del diseño se preveía terminación en agujas como la Catedral de Colonia, pero no se hizo por la falta de dinero. En su lugar, se construyeron dos cúpulas que se ha convertido en un signo distintivo de la iglesia y de la ciudad.
Y en su interior, existe una riquísima colección de arte de los siglos XIV y XVIII de artistas como Erasmus Grasser, Jan Polack, Hans Krumpper e Ignaz Günther y en donde la nave gótica está llena de vidrieras de colores. Sin duda, una atracción de renombre en tu visita a esta ciudad en tus vacaciones de verano.
Foto Vía obshestvo