Cada año muchos turistas se sienten atraídos por un viaje a Colonia debido a su fascinante e impresionante arquitectura e historia.
Colonia es la cuarta ciudad más grande del país detrás de Berlín, Hamburgo y Múnich. Ubicado en el estado de Renania del Norte-Westfalia, descansa a orillas del río Rhin. Inicialmente fundada por el Imperio Romano, Colonia es una de las ciudades más antiguas de Alemania.
Cuando usted visita la ciudad estamos seguros que quedarán encantados con la mezcla de iglesias románicas, edificios sencillos de la posguerra, y la arquitectura moderna clásica. Es por ello que es uno de los destinos preferidos por los turistas que buscan los vuelos a Colonia en la web o en sus principales agencias de viajes para las mejores ofertas turísticas.
Por cierto, la ciudad cuenta con su moderno Aeropuerto Internacional localizado en la Reserva Natural de Wahner Heide, a 15 km al sudeste de Colonia y 16 km al noreste de Bonn. Es considerado el sexto mayor aeropuerto de Alemania y uno de los pocos del país que funciona las 24 horas del día.
Al igual que muchas de las otras ciudades de Alemania, Colonia sufrió muchos ataques aéreos durante la Segunda Guerra Mundial por lo que muchos de los antiguos edificios fueron destruidos. Sin embargo, la mayoría de los edificios clásicos han sido restauradas.
Y lo que atrae a la mayoría de visitar Colonia, es su impresionante Catedral, conocido como Kölner Dom, este hito popular es el símbolo de la ciudad. La construcción comenzó en 1248 dC, pero pasaron más de 600 años para completar esta iglesia gótica.
La Catedral está bajo el control de la Iglesia Católica Romana y es la sede del arzobispo de Colonia. Durante un tiempo tuvo el honor de la estructura más alta del mundo hasta el Monumento a Washington fue terminada. Sin embargo, la catedral sigue siendo el edificio gótico más alto del mundo y es una parte esencial de la historia de Alemania.
Y es que la Catedral tiene 157 metros de altura por lo que fue el edificio más alto del mundo hasta la culminación del Monumento Washington en 1884, con 170 metros. Lo cierto es que fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1996.
Impresiona su enorme campana balanceante más grande del mundo («Der dicke Pitter», que suena sólo en ocasiones muy especiales). Posee una plataforma a 95 metros de altura, desde donde se tiene una excelente vista de la ciudad y del paisaje de los alrededores.
Además, cuenta con cinco naves y uno de sus mayores atractivos es la presencia de un sarcófago que, según la tradición, reposan los cuerpos de los Reyes Magos, hecho que hizo de Colonia una de las grandes ciudades de peregrinación durante tiempos medievales.
Y para relajarte de una forma placentera después de una larga caminata por la ciudad, puedes embarcarte a un crucero como parte de un tour de una hora en el Rin, que son numerosos entre abril y octubre, y compenetrarte con sus hermsoas vistas de la ciudad en sus atardeceres.
Foto Vía tripadvisor