Quien quiera quedar en Madrid con los amigos, nada mejor que en la Puerta del Sol, ¿verdad?. Es el centro por excelencia de la ciudad, y yo diría que de España incluso. ¿Cuántas veces no hemos visto esta plaza la noche del 31 de diciembre para comernos las uvas con las campanadas del reloj madrileño?.
Si queréis saber qué ver en Madrid, uno de los lugares por los que habría que empezar nuestro recorrido sería por la Puerta del Sol. Alrededor de ella tenéis otra serie de atractivos tan singulares como la Plaza Mayor, la Plaza de Santa Ana, Gran Vía, Callao e incluso el Palacio Real y la Catedral de la Almudena.
La importancia de este lugar ya viene dada entre los madrileños desde los siglos XVI y XVII. Aunque curiosamente la plaza en sí no tiene grandes edificios para ver, a excepción del Edificio de la Comunidad de Madrid, ya que lo demás es simbólico, como la señal del kilómetro cero, la figura del Oso y el Madroño, la estatua ecuestre de Carlos III y el emblema de Tío Pepe.
La forma actual de la plaza data de 1768, ya que anteriormente contaba con el Convento de San Felipe y el Convento de Nuestra Señora de las Victorias. Realmente es más un lugar de encuentro que un sitio en el que disfrutar desde el punto de vista turístico. Como curiosidad histórica os podemos decir que fue aquí donde se declaró la II República en 1931.
Peroo antes de esta declaración, en los alrededores de la Puerta del Sol se levantaron los madrileños en el siglo XVI en defensa de las libertades populares. Con el devenir de los siglos, la Puerta del Sol se convirtió en lo que puede llamarse el corazón de la Corte. No había suceso de importancia que no tuviese su desarrollo en esta plaza.
Fue aquí precisamente donde tembién se dio el primer grito en 1808 contra la invasión francesa, el origen tal vez de la Guerra de la Independencia de ese año. Fue aquí también donde, cuatro años más tarde, se quemó la Constitución de 1812 al repatriarse a Fernando VII. De cuántos sucesos habrán sido testigos las piedras de esta plaza.
Por eso, cuando os acerquéis a la Puerta del Sol, desde cualquiera de vuestros hoteles baratos en Madrid, no lo hagáis pensando que vais a encontrar grandes edificio y monumentos. Esta es una plaza original, histórica y de lugar de encuentro. Una plaza que tiene su encanto particular, encanto que debemos encontrarle nosotros.
Foto Vía Go Planit