Uno de los destinos preferidos por los turistas es Dublín, la capital de la República de Irlanda. Con una historia turbulenta desde la época de los vikingos, esta ciudad es una armoniosa mezcla de bares victorianos, casas georgianas plana con frente de vidrio y apartamentos en los Docklands renovadas.
Si tiene en mente un viaje a esta ciudad hay muchas formas de encontrar los mejores vuelos baratos a Dublín en la web para las reservas los 365 días del año. Lo cierto es que son muchas las atracciones turísticas, como el Museo Nacional, los paseos por elegantes terrazas georgianas cerca de Merrion Square, pasando por antiguas casas de luminarias literarias como Yeats, Joyce y Beckett.
Muy cerca del centro de la ciudad se encuentra el Castillo de Dublín, que ahora alberga la mesa de madera en la que el Acuerdo del Viernes Santo se firmó en la Edad Media. Igualmente es gratificante un paseo por la ribera ddel río Liffey hasta mamut O’Connell Street.
Y para los amantes de las compras, los fines de semana en Temple Bar están los mercados en las plazas con sus puestos que están repletos de quesosy artesanos o tiendas de antigüedades. En el mercado de Loft Powerscourt, por ejemplo, hay locales de jóvenes diseñadores venden reelaborado ropa vintage y joyería de plata hasta músicos callejeros en peatonal Grafton Street.
Y para el buen paladar, Dublín cuenta con muchos restaurantes y bares con la venta de sus frescas ostras en la Bahía de Dublín o un pastel delicioso cordero y Guinness en la zona residencial arbolada Ballsbridge, justo al sur del centro. Mientras que en el Barrio Italiano en la orilla norte del río Liffey, se hallan las mejores pastas caseras con pan crujiente.
Foto Vía poreuropa