Los que hemos nacido en esta época tenemos la suerte de viajar en el tiempo. Y no porque hayan inventado ya la alquimia de los siglos, sino porque hay lugares que nos llevan a recorrer otros mundos, otros fragmentos de esta vida. Uno de ellos es sin ninguna duda el Gran Bazar de Estambul.
Su jardín de columnas y techos exquisitamente decorados nos transportan a aquella vieja Estambul que florecía en el imperio otomano. Tan sólo las luces de neón de algunas tiendas nos hacen pensar que quizás seguimos vagando por el siglo XXI. Pero eso no importa, Estambul y su Gran Bazar son un legado magnífico.
Seguro que os coge cerca de vuestros hoteles en Estambul este Gran Bazar. Tiendas de alfombras y especias pueden verse aquí y allá. Lámparas, ánforas, joyas, artesanía, alimentos, y el sugerente aroma del té empapando el aire de una tibia nostalgia. Los turistas y lugareños regatean frente a los puestos.
Los kilómetros y kilómetros de callejuelas de este Gran Bazar, de ahí su nombre, tienen más de cuatro mil tiendas. Los colores, sabores y sensaciones son únicos. Puedes perderte y encontrarte, volver a pasar por las mismas tiendas, regatear, entrar en sus teterías… Todo lo que hagas te devolverá a una vieja Estambul que no conocías.
Pero no sólo de tiendas vive este Gran Bazar. Veréis restaurantes, talleres de orfebrería, mezquitas y hasta comisarías… por si os hiciera falta echar mano de ellas. Para que no os perdáis debéis saber que el Gran Bazar se divide por oficios. Las tiendas y puestos de joyas están todas en el mismo lugar, las de artesanía, alfombras, lámparas, etc… El Gran Bazar es imprescindible en una lista sobre qué ver en Estambul.
Es sin duda el lugar ideal para ir de compras en Estambul. Disfutas también recorriendo sus calles, echándote fotos en sus pequeñas plazas, delicadas y bulliciosas. Es como si estuvieras dentro de un universo único e irrepetible. Dejaros llevar por la esencia medieval de este lugar, y seguro que lo disfrutáis como nunca.
A veces también, tanto por el bullicio incontrolado de la gente como por los vendedores que te abordan, resulta un tanto agobiante. Si no tenéis intención de comprar, no les hagáis caso porque, a la mínima que os vean que os paráis, se os echarán encima para intentaros vender sus mercancías.
¿Alguna recomendación?. Pues os diría que para comprar, vayáis a las tiendas que están alrededor del Gran Bazar, más baratas y menos turísticas. Las del interior se aprovechan un poco del turista. Por cierto, si pagáis en euros os sale más caro. Utilizad mejor la lira turca.
Foto Vía 11870 Wonderland