La elegante Barcelona es una de las ciudades más cautivadora de la España moderna. Las huellas de su pasado inundan la ciudad desde la arquitectura hasta la cocina. También es la primera ciudad de Cataluña por lo que los hoteles en Barcelona proporcionan todas las comodidades del caso para una estadía memorable.
Obligado entonces es un recorrido por el centro de la ciudad, llena de tiendas de regalos, encantadores cafés, bares de moda, y buenos restaurantes situados entre calles empedradas. En este sentido, el visitante se compenetra con un recorrido a sus famosos barrios que caracterizan esta zona histórica.
Por ejemplo, destaca La Ribera, ubicado justo al este del Barrio Gótico, cuyas calles están llenos de galerías de moda, bares, cafeterías y discotecas. La playa está a una caminata rápida de cinco minutos hacia el sur, y La Rambla se halla a diez minutos hacia el oeste. Otros puntos de interés es el barrio del Parc de la Ciutadella (con sus palmeras llenas de loro) y el famoso Museo Picasso.
Y no menos atrayente es La Rambla, alrededor de una milla del puerto a la central de la plaza de Catalunya, y que junto con el Barrio Gótico, La Rambla, representa no sólo el centro del barrio turístico, sino también el corazón de la ciudad para los locales.
El boulevard se divide en cinco secciones, cada una con su propio nombre. Durante todo el año y durante todo el día, artistas callejeros, artistas acera, amantes, locos, clientes del café, los carteristas y multitudes de turistas a la calle a pasear.
Finalmente, hay que mencionar al Barrio Gótico que es uno de los cuatro barrios que forman el distrito de Ciutat Vella de Barcelona. Se le considera también el núcleo más antiguo de la ciudad y su centro histórico. El cardus y el decumanus romanos son los ejes de urbanización históricos del barrio en su parte más alta, el antiguo Monte Táber (plaza San Jaime).
Foto Vía mon-photo