A pesar de ser un país no demasiado extenso, Croacia cuenta en total con ocho parques nacionales. De todos ellos, el más turístico es el Parque Nacional de los Lagos de Plitvice, un fenónemo natural único en el mundo y realmente fascinante, tanto para los amantes de la naturaleza como para los que buscan descubrir las maravillas de este país.
Cualquiera de los viajes a Croacia que se organicen llevan consigo una visita a este parque. Está situado entre los pueblos de Lika y Kordun y entre las montañas de Mala Kapela y Licka Pljesevica, a lo largo de la carretera que une Zagreb con Dalmacia. Lo más característico de este parque nacional son sus formaciones kársticas, con una gran cantidad de cuevas.
En total hay unos 16 lagos de aguas azules cristalinas y verdosas, todos ellos conectados con pequeñas cascadas y saltos de agua. Precisamente, en este parque se halla la cascada más alta de Croacia, la Veliki Slap, con 78 metros de altura.
Junto a esta maravillosa mezcla de aguas cristalinas, lagunas y cascadas, resalta la impresionante flora y fauna del parque. Los lagos cuentan con una gran variedad de peces y mariscos, aunque la pesca solo está permitida en algunos lugares, y con un permiso especial. Además, más de la cuarta parte del parque está compuesto por bosques de hayas, abetos y pinos, junto con un gran número de especies originales de plantas.
Por todo el parque nacional viven osos, lobos, nutrias, jabalíes, hurones, ardillas, conejos y zorros. De todos estos animales, la especie más impresionante es la del oso pardo. A ellos hay que añadirle las más de 120 especies de aves que están registradas en el parque, de las cuales más de setenta son autóctonas.
No es de extrañar entonces que el Parque Nacional de los Lagos de Plitvice sea Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1979. Viajar hasta aquí es encontrarse con uno de los parques nacionales más hermosos de Europa, amén de ser el más antiguo y más grande de Croacia.
Os recomiendo visitarlo especialmente en primavera, ya que en verano hace mucho calor y en invierno está nevado y frío. De todas maneras, en invierno es espectacular ver cómo las cascadas se han convertido en hielo. Podéis organizar una ruta turísticas de ocho kilómetros que recorre todo el parque, descubriendo un amplio laberinto de sonidos, colores y olores. Es una sensación increíble cruzar los puentes de madera que se sitúan sobre los lagos y cascadas.
Foto Vía Travel 2 Croatia