Una visita a Dublín, la capital de la República de Irlanda, ubicada cerca del centro de la costa Este de la isla, en la desembocadura del río Liffe, siempre es memorable en vista que la buena diversión está asegurada sumado a experiencias memorables con la visita a sus atractivos como la fábrica de cerveza Guinness, la Catedral de San Patricio, el Trinity College, el Castillo de Dublín, la Iglesia de Cristo, el Temple Bar, la destilería San Esteban Jameson, entre otros atractivos.
Pero si se busca compenetrarse con la historia de Irlanda hay que visitar Kilmainham Gaol, que es una antigua prisión donde fueron recluídos los principales gestores de la revolución irlandesa muchos de ellos ejecutados. La cárcel estaba en uso desde la década de 1780 hasta el 1920 y ahora es una de las mayores prisiones en desuso en Europa convertida en Museo.
El recorrido dura unos 90 minutos e incluye una presentación de video que brinda información básica sobre la Revolución y un paseo a pie a través de las celdas de la prisión y el patio. Los guías contarán muchas historias sobre cómo los prisioneros se comportaban y vivían sus vidas día a día allí.
Un detalle a tomar en cuenta es que en ésta cárcel no había separación de prisioneros por cuestión de sexo ni de edad, así tanto los hombres como las mujeres convivían en las mismas zonas igual que los niños.
La visita finaliza en el patio dónde fueron ajusticiados, entre el 3 y el 12 de mayo, los miembros de la revuelta de 1916 y el lugar en el que se ejecutó a James Connolly a pesar de su precario estado de salud a consecuencia de las heridas recibidas durante la revuelta.
Desde su restauración, Kilmainham Gaol se ha entendido como uno de los monumentos irlandeses más importantes de la época moderna. Principalmente esto se ha entendido en relación con la narración de la lucha por la independencia durante el período que se extiende desde su inauguración en 1796 hasta su desmantelamiento en 1924.
Daniel O’Connell y Michael Collins, también fueron importantes líderes nacionalistas que pasaron sus días en la cárcel. Cabe anotar que la mayoría de los dirigentes irlandeses en las rebeliones de 1798, 1803, 1848, 1867 y 1916 fueron encarcelados en Kilmainham Gaol. También albergó prisioneros durante la Guerra de Independencia irlandesa (1919-1921) y durante el período de guerra civil.
El último preso de la cárcel fue Éamon de Valera que salió de la cárcel el 16 de julio de 1924. Este año la cárcel se cerró definitivamente sufriendo una remodelación de la década de los 70.
Horario
De abril – De septiembre: Diario 09:30 – 18:00 (última admisión a las 17:00)
De octubre – De marzo: Viernes y sábados 09:30 – 17:30 (última admisión a las 16:00)
Dirección
Inchicore Road, Kilmainham, Dublin 8.
Foto Vía anchorhousedublin