No hay mejor lugar para que los viajeros conozcan y entiendan a un país que sus festivales donde se celebra con orgullo su individualidad, ya sea a través de la música, las artes, la religión, la gastronomía hasta carreras de camellos.
En este sentido, si se tiene en mente un viaje a Europa en verano para disfrutar de algunos festivales, hay que considerar éstos eventos que se organizan durante el mes de julio de cada año.
Lucha libre de Kirkpinar
Ubicación: Kirkpinar, Edirne, Turquía
Fechas: Primera semana de Julio
Durante los primeros días del mes, se desarrolla un evento que recuerda el expansionismo del Imperio Otomano, donde un comandante militar Süleyman Pasa dejarba que sus soldados se relajen en medio de la guerra en una especie de torneo de lucha libre.
Se relata que dos de los combatientes más feroces llegaron a pelear hasta pasada la medianoche hasta que ambos murieron de agotamiento. Todo ello se realizó en las afueras del pueblo de Kirkpinar.
No está claro si el aceite de oliva se usaba en la época otomana, pero sin duda se practica en la actualidad durante el torneo de tres días, comenzando con una ceremonia de apertura en donde los concursantes, algunos sólo de los niños, se tienen que engrasar todo el cuerpo. La idea es evitar que el enemigo llegue a agarrar al contrincante y tirarlo al suelo.
Festival de Arte Popular de Marrakech
Lugar: Palacio el-Badi, Marrakech, Marruecos
Con encantadores de serpientes se reciben a los turistas en la plaza Djemaa el-Fna. Y es cuando la bulliciosa Marrakech organiza un festival donde el color y el ritmo se intensifican durante el Festival de Arte Popular, cuando los artistas de todo el país del norte de África llegan a la ciudad como un lugar al aire libre para mostrar su arte y talento.
Allí el turista encontrará puestos de artesanos, joyeros, adivinos, músicos, bailarines y cantantes folclóricos . Lo cierto es que el principal punto de encuentro para los artistas es el Palacio el-Badi, construido por Ahmed al-Mansour entre 1578 y 1602,ahora en ruinas, tenía fama de ser una de las más bellas del mundo y bien merecido su nombre, el Incomparable.
San Fermín
Lugar: Plaza de Toros, Pamplona, Navarra, España
Del 7 al 15 de julio del 2014 llegan los Sanfermines a Pamplona, cuya fiesta se inicia con el estallido del «chupinazo» por lo que ciudad acoge a miles de personas de todo el mundo que inundan la ciudad que se tiñe de blanco y rojo.
Allí, la Corrida de Toros es un derroche desenfrenado de la pasión de todo un pueblo como parte de las festividades dedicadas al santo patrón del pueblo, San Fermín, donde cientos de ‘corredores’ tienen que correr a lo largo de 800 metros de la calle para evitar que sean cogidos por los toros.
Cada año, sin falta, hay lesiones e incluso fallecimientos productos de las cornadas. Las dos secciones más aterradores de la carrera son Estafeta, el callejón de piedra con sólo pequeñas puertas para refugiarse y la estrecha entrada a la Plaza de Toros, que es como un cuello de botella.
Foto Vía boston