En la temporada invernal uno de los deportes preferido es el esquí. Y nada mejor que disfrutar el esquí en los Alpes, que es la cadena de montañas más famosa e importante de Europa Central, que cuenta con su pico más alto, Le Mont Blanc, de 4.810 metros de altitud.
Hay que saber que los Alpes se dividen en tres sectores: los Occidentales, desde la costa del Mediterráneo hasta el Valais; los Centrales, desde el Valais hasta los Grisones y los Orientales, que abarcan el resto de la cordillera hacia el este y el sur. Precisamente, en Suiza, se encuentra una popular estación de esquí : Arosa.
Se halla en el extremo del romántico valle de Schanfigg a una altura aproximada de 1800 metros en el Cantón de Grisones. Arosa cuenta con una zona de esquí con más de 60 kilómetros (37 millas) de pistas al que se llega por medio de 2 telesillas y un teleférico que conducen a la zona de Tschuggen , a 2,000 metros de altura.
Allí se encuentran las pistas para principiantes que son excelentes para iniciarse. Y si continuamos en el teleférico se llega a la cima del Weisshorn a casi 2,700 metros, el punto más elevado de la estación. Aquí es donde encontramos las pistas más exigentes e interesantes de Arosa; un lugar paradisíaco para las vacaciones de invierno.
Un detalle a tener en cuenta que es mucho más que una estación de esquí, ya que es un verdadero centro de deportes invernales que ofrece la posibilidad de disfrutar de todas y cada una de las diferentes actividades en la nieve.
Otro detalle es que Arosa cuenta con abundantes horas de sol, y un natural reparto de los vientos fuertes que brindan un clima especial a la región. A esto hay que agregar que Arosa ofrece 4.287 camas de huéspedes distribuidos en sus hoteles y hostales para todo tipo de bolsillos.
Un factor interesante es que si se viaja en la temporada de verano es que Arosa cuenta con 200 kilómetros de caminos señalizados para las excursiones que llevarán a sus bellos lagos. Y para aquellos que desean profundizar la excursión de varios días se puede llegar Davos desde Arosa. Por su parte, los ciclistas de montaña pueden elegir entre varias rutas de 50 kilómetros de largo.
Para conocer un poco más del pueblo que se encuentra en la parte superior de un largo valle con frondosos bosques, es que es un lugar muy agradable, o sea, es la clásica estación suiza que todos nos imaginamos o hemos visto en las películas. Allí hay restaurantes, bares y alojamiento. Un lugar que no debe pasar desapercibido en la temporada invernal europea.
Foto Vía fuuta-jaloo
