A pesar de estar en Suecia, a Lund se llega mucho mejor desde Dinamarca. No en vano apenas se halla a 65 kilómetros de Copenhague, en la región de Oresund. Os la recomiendo porque se trata de una de las ciudades más antiguas de Suecia. De ahí que tenga una magnífica historia y un patrimonio monumental de gran interés.
Nosotros la escogimos como una de las excursiones que se nos proponía desde Copenhague. Solo teníamos que atravesar el estrecho de Oresund, visitar Malmoe y hacer un hueco en nuestras vacaciones para Lund. Fue fundada en el año 1020 por el rey danés Sven Forkbeard, y poco más tarde ya se convirtió en una de las ciudades más importantes de la zona.
Solo hay que contemplar su espectacular catedral para darnos cuenta de la importancia que tuvo Lund en su momento. Muchos expertos la consideran como el mejor ejemplo de la arquitectura románica de los países nórdicos. Consagrada a San Lorenzo desde su construcción en el siglo XII, su fachada está flanqueada por dos torres de 55 metros de altura. Destaca especialmente su reloj astronómico, construido en el siglo XV.
Si seguimos visitando Lund encontraremos el Kulturen, un museo al aire libre situado en el centro histórico y que cuenta con hasta 30 edificios históricos, un jardín, una sala de exposiciones y un restaurante. Se trata de un museo en el que conoceremos cómo vivía la gente en Suecia durante los siglos pasados. Resulta un placer pasear por las dos manzanas que ocupa, recreándonos en todos sus atractivos históricos.
Precisamente el centro de Lund mezcla tradición y modernidad. Desde aquí se visita el Jardín Botánico (gratuito) en el que se exponen diferentes especies de todo el mundo. No hay que pasar por alto, ni mucho menos, la Universidad de Lund, fundada en el siglo XVII. Resulta curioso que sea precisamente esta universidad la más grande de Escandinavia, de ahí que el ambiente de la ciudad sea magnífico durante todo el año.
A mí particularmente me encantó Lund, una ciudad pequeña pero histórico y hermosa. Sus calles empedradas y el trasiego de estudiantes en bicicleta le dan un aire encantador y bohemio que os resultará muy agradable. Además está a solo 35 minutos en tren de Copenhague, una oportunidad inmejorable.
Foto Vía Travelpod
