Hungría se distingue por una fascinante mezcla de influencias culturales cuya historia se remonta a los tiempos de los magiares del siglo IX, la invasión de los mongoles en el siglo XIII, la llegada de los turcos en los siglos XVI y XVII, y por último la influencia de Austria, al imponer sus designios culturales, políticos y económicos.
Y entre sus ciudades encantadoras y pintorescas destaca Szentendre (San Andrés, en español), ubicado a sólo 10 kilómetros al norte de Budapest, asentada sobre el río Danubio y lugar ideal para un inolvidable paseo de verano.
Una gran parte de Hungría de ocho siglos de historia y cultura se centra en la región alrededor de esta ciudad, que fue fundada en el siglo XIV por los refugiados serbios que huían del avance turco. La ciudad más tarde jugó una parte integral del renacimiento húngaro.
Lo cierto es que magia cautiva al visitante. Es un pueblo del siglo XVIII perfectamente conservado y embellecido por pulcras casas de colores brillantes, de bellas iglesias barrocas y calles empedradas todos rodeados de vegetación exuberante.
La plaza principal de la ciudad, Marx tér, con su monumento cruz rococó central, está totalmente empedrado y el conjunto de edificios que lo rodean forman un monumento histórico nacional.
En esta zona el visitante encuentra algunos de los mejores lugares para comer. Esto hace de Szentendre tan popular como uno de los principales lugares de Budapest para experimentar la cocina húngara, así como tiendas y cultura.
El turismo a Szentendre se ve reforzado por su verdadero” museo al aire libre” que muestra el folklore, la arquitectura y la cultura de la región. Casas típicas con techo de paja y encalado, granjas y molinos del campo y una iglesia de madera del siglo XVIII es lo que le espera al turista que es recibido con un buen vino húngaro.
También la ciudad ofrece una gran cantidad de museos populares localmente, como uno dedicado al famoso artista húngaro, Jenõ Barcsay, y otro para el ceramista Kovács Margit. Otros museos de arte exhiben las obras de los maestros del pasado, así como muchos de los 700 artistas contemporáneos originarios de la región.
Otro detalle es que la ciudad cuenta con una ubicación estratégica ventajosa en el recodo del Danubio y al pie de las montañas de Pilis, y la proximidad de las montañas hace a la ciudad un buen punto de partida para el senderismo y excursiones al campo.
Foto Vía Europe.fi
