En una posición privilegiada en la costa noreste de la península ibérica y las costas del Mediterráneo, Barcelona es la segunda ciudad más grande de España tanto en tamaño y población. Es también la capital de Cataluña, una de las 17 Comunidades Autónomas que conforman este país.
Y, sin duda, esta ciudad es uno de los destinos preferidos para una visita de ocio o negocios. Es por ello que los hoteles en Barcelona ofrecen los mejores servicios para todo tipo de bolsillos y localizados cerca de las atracciones turísticas. Una de ellas es Tibidabo, que es una montaña con vistas privilegiadas de Barcelona.
Con sus 512 metros es la montaña más alta de la Serra de Collserola. Cabe destascar que hay un parque de diversiones, una torre de telecomunicaciones (Torre de Collserola), y una iglesia católica, el Templo de Sagrat Cor, en la parte superior, todos los cuales son visibles desde la mayor parte de la ciudad.
Creado por Enric Sagnier, la iglesia tomó 60 años para construir y está coronada por una escultura del Sagrado Corazón de Josep Miret Llopart. En cuanto al parque de atracciones, es el más antiguo de Barcelona y conserva la mayor parte de los juegos originales, algunos de los cuales datan de finales del siglo 20.
A Tibidabo se puede llegar por un funicular, en autobús y en coche. La montaña del Tibidabo comenzó a ser urbanizada a finales del siglo XIX, por iniciativa del doctor Salvador Andreu, propietario de un laboratorio farmacéutico que producía las famosas «Pastillas del Dr. Andreu».
Las crónicas relatan que a principios del siglo XX se inauguró la Avenida del Tibidabo, que rápidamente se convirtió en zona de la clase alta barcelonesa edificandose bellos edificios de estilo modernista construidos por los mejores arquitectos de la época.
Foto Vía mundofotos